09 Ene Me Tratan de Fascitis y no me Curo
ME DUELE EL TALÓN, ME TRATAN DE FASCITIS Y NO ME CURO.
Jose Carlos es un paciente que desde hace un año y medio tiene mucho dolor en el talón de ambos pies. Nos comenta que fue diagnosticado de talalgia bilateral y tratado con ondas de choque e infiltraciones por otros compañeros, sin obtener mejoría. Además, nos cuenta que padece lumbalgia.
En consulta le realizamos una exploración ecográfica de alta definición con ecógrafo Canon Aplio A, encontrando hipervascularización en la inserción del tendón de Aquiles, sintomatología neuropática en la rama calcánea y en la rama plantar medial del nervio Tibial, compatible con la patología síndrome del túnel tarsiano, y fasciopatía con posible rotura en ambos pies.
Durante la exploración clínica el paciente nos comenta que tiene dolor bajo la cabeza de los metatarsianos (metatarsalgia), pero en este caso, no se trata de un problema adicional que sufre el paciente, sino que está siendo causado por el acortamiento gemelar que padece. El acortamiento de los gemelos, produce un efecto biomecánico en el cuerpo muy similar a ir caminando con zapatos de tacón, sin la necesidad de llevarlos, provocando que nuestro centro de gravedad y todo el peso se desplace hacia delante produciendo una metatarsalgia.
La fasciopatía (fascitis plantar) y el síndrome del túnel tarsiano fueron tratados mediante tratamiento conservador, poniendo inyecciones guiadas con ecógrafo y dando sesiones de láser de alta potencia en la fascia plantar y en el túnel tarsiano de ambos pies.
A Jose Carlos le propusimos realizar una liberación gemelar ecoguiada bilateral, ya que, padece lumbalgia y metatasalgia, dos consecuencias provocadas por el acortamiento que tiene de la musculatura posterior: gemelos. Además, con la liberación conseguiremos quitar tensión en la zona insercional del tendón de Aquiles.
Bajo anestesia local, se lleva a cabo una liberación de gemelos por cirugía mínimamente invasiva y ecoguiado.
Esta técnica quirúrgica, al realizarse mediante cirugía mínimamente invasiva, se utiliza un instrumental especializado que nos permite realizar incisiones muy pequeñas, de tan solo 1 o 2 mm, donde no es necesario suturar y a las 48h de la intervención están cerradas.
Tras finalizar la cirugía, de forma inmediata somos capaces de comprobar que se ha producido un aumento de los grados de flexión dorsal de tobillo necesarios para la marcha.
Desde el minuto 1 del posoperatorio, Jose Carlos al igual que todos los pacientes que son intervenidos por esta técnica mínimamente invasiva de liberación gemelar con ecógrafo, son capaces de salir caminando por su propio pie, sin requerir muletas o algún calzado especial.
El posoperatorio no es nada invalidante para el paciente, pudiendo realizar su actividad normal y notando una gran mejoría pasados los primeros 30 días desde la intervención. En casa el paciente deberá de realizar una serie de estiramientos sencillos pautados por la Dra. María del Mar Ruiz.